El aftersun es un producto cosmético especialmente indicado para aliviar, calmar e hidratar la piel después
de la exposición de sol. Su uso contribuye a restablecer el equilibrio
hidrolipídico de la epidermis para mantener el nivel de humedad de la piel.
Debes recordar que nuestra piel tiene un alto porcentaje de agua repartirá por
diferentes capas del cuerpo, pero esta agua se va perdiendo debido a la
radiación solar. Por ese motivo, no solo debemos beber más agua en verano sino
también debemos hidratar nuestra piel con aftersun para mantenerla correctamente
hidratada y protegida de los efectos de los radicales libres.
En cuanto a su aplicación,
siempre se ha dicho que se debe aplicar solo cuando nos quemamos, pero esto no
es cierto. Debemos utilizar el aftersun
tras la exposición solar aunque no tengamos la piel irritada o quemada ya
que cuando nos bronceamos, la piel nos está indicando que ha sufrido una agresión
y por tanto, deberemos repararla aplicándonos una loción que hidrate a la vez
que calme la epidermis. El aftersun
debe aplicarse sobre la piel limpia, es decir, después de la ducha ya que de
esta forma eliminaremos tanto el cloro de la piscina como la sal de la playa de
nuestra piel. Si utilizamos el aftersun no hará falta utilizar después la crema
hidratante para el cuerpo. De hecho, normalmente durante los meses de verano es
preferible usar aftersun y para los meses de invierno las hidratantes corporales ya que solo tienen un efecto hidratante,
pero no calman la piel después de exponerla al sol.
El uso del aftersun durante la
temporada estival nos aportará numerosos beneficios para la piel así como para
nuestra salud. A continuación, te destacamos algunas de sus propiedades:
- Hidrata hasta las capas más profundas de la piel. Esto quiere decir que aportará agua tanto a las capas superficiales como a las profundas de nuestro cuerpo.
- Aporta nutrición y suavidad de forma que la piel no se pelará o descamará. Utilizado junto con los protectores solares, el aftersun evitará el envejecimiento prematuro de la piel.
- Reduce el enrojecimiento y aportará frescor a la piel calmando así la sensación de tirantez o calor.
- Favorece a que el bronceado dure más.
Aunque no se le dé la importancia
que se merece, el aftersun es un
producto cosmético de suma importancia para los meses de verano. En primer
lugar, deberemos utilizar los protectores
solares ya que actúan como capa protectora frente a los rayos ultravioleta
de forma que evitarán que nos quememos. Y después de la exposición solar y tras
una buena ducha que dejará nuestra piel limpia, aplicaríamos el aftersun para hidratar y calmar la
epidermis. Encuentra estos y muchos más productos en nuestra sección de protectores solares para
disfrutar de un verano totalmente seguro.
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